jueves, 28 de octubre de 2010

Amós 8: Cuarta visión y advertencias

Vienen días —afirma el Señor omnipotente—,
en que enviaré hambre al país;
no será hambre de pan ni sed de agua,
sino hambre de oír las palabras del Señor.
La gente vagará sin rumbo de mar a mar;
andarán errantes del norte al este,
buscando la palabra del Señor,
pero no la encontrarán.

martes, 26 de octubre de 2010

Amós 7: Tres visiones

Yo no soy profeta ni hijo de profeta, sino que cuido ovejas y cultivo higueras. Pero el Señor me sacó de detrás del rebaño y me dijo: "Ve y profetiza a mi pueblo Israel."

sábado, 23 de octubre de 2010

Amós 3: Vocación del profeta Amós

En verdad, nada hace el Señor omnipotente
sin antes revelar sus designios
a sus siervos los profetas.

viernes, 22 de octubre de 2010

Amós 2: Juicio contra Israel

Los delitos de Judá han llegado a su colmo;
por tanto, no revocaré su castigo:
Porque, dejándose descarriar por sus mentiras,
tras las cuales anduvieron sus antepasados,
rechazaron la *ley del Señor
y no obedecieron sus preceptos.

lunes, 18 de octubre de 2010

Joel 1: La invasión de langostas

Entréguense al ayuno,
convoquen a una asamblea solemne.
Reúnan a los ancianos del pueblo
en la casa del Señor su Dios;
reúnan a todos los habitantes del país,
y clamen al Señor.

lunes, 4 de octubre de 2010

Oseas 2: Castigo y restauración de Israel

Yo la sembraré para mí en la tierra;
me compadeceré de la "Indigna de compasión" ,
a "Pueblo ajeno" lo llamaré: "Pueblo mío" ;
y él me dirá: "Mi Dios" .

domingo, 3 de octubre de 2010

Oseas 1: La esposa y los hijos de Oseas

Ésta es la palabra del Señor que vino a Oseas hijo de Beerí durante los reinados de Uzías, Jotán, Acaz y Ezequías, reyes de Judá, y durante el reinado de Jeroboán hijo de Joás, rey de Israel.

sábado, 2 de octubre de 2010

Daniel 12: La hora final

Pero tú, persevera hasta el fin y descansa, que al final de los tiempos te levantarás para recibir tu recompensa.

viernes, 1 de octubre de 2010

Daniel 11: Reyes del norte y del sur

Este imperio no será para sus descendientes, ni tendrá el poder que tuvo bajo su gobierno, porque Dios lo dividirá y se lo entregará a otros.